Descripción del Módulo
El Inconsciente graba los impactos que has tenido a lo largo de la vida, que quedan asociados a determinados estímulos. Cuando estos estímulos son detectados por los sentidos, el impacto se vuelve a activar, causando las mismas sensaciones de antaño. Estas son las “grabaciones” que vamos a tratar en este primer módulo. Estas grabaciones emocionales intensas (tanto positivas como negativas) condicionan tu vida de hoy, no dejándote reaccionar como quisieras y disfrutar de lo que tienes. En general, tropezamos en las mismas piedras una y otra vez, incapaces de modificar emociones y conductas.
También hay rasgos de comportamiento aprendidos en el núcleo familiar. Son formas y normas que no necesariamente son habladas, pero que todos los miembros de la familia conocen, respetan y siguen. Se mantienen en el tiempo por una lealtad familiar, a veces inconsciente. Algunas son funcionales, otras totalmente disfuncionales. Dejar de lado estos rasgos se percibe como una deslealtad a la familia y también como un alejamiento de ella al no cumplir la ley familiar. Por ello, muchas veces te puede resultar difícil cambiar tu comportamiento, aunque lo estés deseando.
A través de la purificación emocional y de quitar viejos malentendidos de tu sistema de creencias, eres capaz de tener una nueva visión de la vida y de las personas. Al experimentar sentimientos más elevados, puedes llegar a comprender, perdonar y hasta agradecer todo lo que ha ocurrido hasta ahora. De esta forma, puedes tener un reencuentro liberador con padres, hermanos y todas las figuras importantes de la infancia, adolescencia y también adultez.
Al quitar el peso del pasado, puedes vivir tu momento actual con todo su potencial y de una forma consciente. Al dejar de repetir los viejos patrones, serás capaz de disfrutar de todo lo que la vida generosamente ofrece cada día y de todo lo que ya has logrado…
En este módulo también tomarás un contacto renovador y creativo con tu niño/a interno/a, símbolo de las reacciones infantiles y de las vivencias que te marcaron, para poder crecer y madurar emocionalmente.